Rafael Castillo J. CNP. 17.120. Según Marx…”la historia ocurre dos veces; la primera vez una gran tragedia y la segunda una miserable farsa”… Nuevamente mi humilde opinión discrepa con semejante personaje.
Traigo esto a colación después de escuchar “ la gran tragedia” que vive la familia Caraffa Ramos, quienes tienen una posesión pública,pacífica y notoria de más de 40 años,sobre un terreno situado al margen izquierdo, sentido Calabozo San Fernando, de la Avenida Francisco de Miranda; sustento y desarrollo de tres generaciones que a lo largo de esas décadas han trabajado en el lugar utilizado como estacionamiento de vehículos y vivienda principal y que hoy son amenazados y hostigados por un sorpresivo “dueño”.
La historia se repite,sin dudas, porque si revisamos el contexto histórico y hacemos un paralelismo con el año 1929, cuando Don Romulo Gallegos, bajo la férrea dictadura de Juan Vicente Gómez escribió a “Doña Bárbara”,describiendo las tropelías de la clase dominante en los llanos apureños, con la situación de ésta familia calaboceña, estaríamos frente a una “miserable farsa”, según Marx. Pero muy a su pesar, para mí, estamos frente a “ la gran tragedia” como la primera vez.
De tal manera que,si en ese paralelismo entre la novela y la situación de los Caraffa Ramos y viajamos por los rieles del recuerdo de ésta obra,saltarían a la vista la reencarnación de funestos personajes: la “la cacica del Arauca”convertido en “ el cacique de Calabozo”, que en su psicopatía terrofaga y con la complicidad de no pocos tarifados Ño pernaletes y mujiquitas, no escatima recursos económicos y de otros tipos; llegando al extremo de falsificar documentos para adueñarse del”Altamira” calaboceño.
Es de resaltar que en ésa “gran tragedia” el bongo de la esperanza,que una vez remontó el Arauca para llevar a Santos Luzardo hasta los predios del Hato “Altamira “, hoy sigue navegando conducido por la fuerza de la honestidad y tenacidad”Luzardina”de los Caraffa Ramos, superando diversos escollos legales e ilegales de la gente de “ El miedo “, gracias a destellos de Justicia encontrados en funcionarios honestos, los cuales ni los dólares de éstos Emiratos han podido corromper, hay reservas Morales en el Poder judicial.
Los buenos son mayoría, sólo que, con su silencio y el ensordecedor eco de los canallas éstos se hacen más visibles. Así las cosas,es bueno decir que hay un estridente silencio de los administradores de los ejidos municipales y del Fiscal general.
Esperamos que un día salgan de su mutismo actúen apegados al Ordenamiento Jurídico vigente,alejados del nauseabundo tremedal del accionar de la gente de “El miedo”… mientras tanto aquí sigue ésta familia, encerrados con sus menores hijos, temerosos a que un nuevo explosivo les sea enviado o que un Balbino Paiva o un “ brujeador”,espaldero del terror los ataque en cualquier esquina. Otro drama de ésta tierra de horizontes abiertos, donde una raza ama, sufre y espera.
Calabozo 04/01/2023.