El Estado venezolano denuncia que dicha acción incurre en la violación, una vez más, de todos los principios de la Carta de la ONU, «con el objeto de seguir intentando promover la política fracasada de ‘cambio de régimen’, instruida desde los Estados Unidos de Norteamérica», recalca parte del texto.
Asimismo, el gobierno de Maduro ratifica su compromiso con la promoción, respeto y protección de los derechos humanos como un valor supremo, en consonancia con sus obligaciones internacionales.
«Exhortamos, una vez más, al Consejo de Derechos Humanos y sus Mecanismos, a cooperar y avanzar sobre la base del diálogo genuino y respetando los principios de universalidad, objetividad, imparcialidad, no selectividad y con pleno apego a la soberanía y la no injerencia en asuntos internos», exhorta la nación en el documento.
Fuente: el siglo